Ecosocialismodescalzo



Libro en cuestión:

Ecosocialismo descalzo Tentativas. de Jorge Riechmann con Adrián Almazán Gómez, Carmen Mandorrán Ayerra y Emiilio Santiago Muiño.

El libro se centra en la dificultad casi inmediata que tendrá el mundo, y el agro por lo tanto, para procurarse las energías necesarias a la producción.

El título era tentador. Los países socialistas (URSS y CHINA) descuidaron ampliamente el medio ambiente y llevaron regiones enteras al colapso del entorno natural y a la contaminación extrema. Ya el que se titulase “Ecosocialismo” abría la puerta quizás para la reflexión en cuanto a como se podría construir una ruralidad en espacios no regidos por las leyes expoliadoras del mercado. No proponía el título una mejora en el nivel de vida, sino que invocaba un retorno a las simplicidades de los pobres extremos y descalzos; un desafío intelectual a escudriñar.

El libro es vasto, muy centrado en la ética que deberemos tener para poder compartir socialmente en democracia y libertad los pocos porotos que restarán cuando termine la fiesta termodinámica de los combustibles  fósiles.

Los números son aterradores. Ya el libro “Colapso” de Diamond era de lectura inquietante; “Ecosocialismo descalzo” es un espanto. La obra de Diamond se ilustra en pasados lejanos e islas. La de Riechmann y colegas acumula datos y previsiones que nos ponen por escenario el futuro cercano en nuestra puerta.

Primero las previsiones poco discutibles del Club de Roma sobre los límites del crecimiento, luego una miríada de datos que argumentan el pesimismo y el ansia. Para dar una idea de lo temible del cálculo: en España quedarían 180.000 vehículos impulsados por hidrocarburos si se quisiera llegar al equilibrio. Para ilustrar el poder de los combustibles fósiles nos explica y calcula  que un solo barril de petróleo de unos 150 litros, equivale al trabajo termodinámico de un hombre durante 10 años en jornadas de 8 horas 5 días por semana.

El libro está lleno de buenas intenciones, y es importante la crudeza del planteo y la verosimilitud de los escenarios previsibles. Desarma todas las pretensiones de sustentabilidad que las empresas internacionales proponen. Queda claro: no hay sustentabilidad posible en actual sistema de explotación y producción neo-liberal.

Dan muchas pruebas que el TRE (tasa de retorno energético) en la producción de energía es un factor determinante para la calidad de vida social y política de una sociedad. Y muchos etc. quehay que ir a leer para perder el sueño.

Pesimismo realista necesario. Sobre todo para los rurales, quienes estamos en la primera linea del enfrentamiento del hombre contra la naturaleza y que sería prudente transformar rápidamente en una colaboración.


© Jose Antonio Berni 2014